Día 170. El secreto

Anda por aquí a menudo un ferviente seguidor semitransparente del blog que espero pronto salga del economato (estoy jugando a confundir Anonimato <-> Economato, por si no se pilla, lo subtitulo; y encima no es mio el chiste, que es de GomaEspuma, que a su vez lo ha copiado de ... vale, vale, que me lío).
Es, posiblemente, un futurible. Y además escribe bien el tío.
Me estira de las orejas, con razón, porque hay gente que tiene la intención de venir al lado oscuro (=implantarse, subtitulo, joer) y llega a este blog vía Google o que se yo y se encuentra con un laaaaargo scroll de comentarios, algunos desechables -coclearmente hablando-, y la información importante queda perdida por ahí.
Y vuelvo a darle la razón (con peros, los maridos de las peras).
Y es que este blog ha crecido más de lo previsto, pero tengo que recordar que quizá el "éxito" (tampoco exageremos, neeeng) de este diario es el buen rollete. Y para conseguir ese ambiente, a menudo son necesarios los comentarios "menos provechosos", coclearmente hablando (y escuchando).
¿O es que las novelas de Zafón no se pueden resumir porque todo es importante?

Zanjo este tema con un "este es mi Scatergories" (sin malafollá) y que de momento no habrá traslados a mejores sistemas, pero por si acaso no digo "de steaua (de Bucarest) no beberé" (este no lo subtitulo pa que pienses).

A los futuribles necesito decirles algo.
Y creo que es importante. Qué digo, es importantisssmo!.

Os estáis informando de mil formas de todas las clases, marcas, tipos, accesorios, médicos, hospitales, etecé, etecé de cara a vuestro nuevo orejo. Está bien que lo hagáis, aunque la información de Internet, a veces, os puede llevar a conclusiones incorrectas.
Os estáis olvidando de lo que más necesitaréis en la operación: actitud.
Ese es el secreto de que salga todo bien, una actitud positiva, y contagiosa para el equipo médico, familiares y amigos. Todo está conectado. Debéis estar convencidos de que va a salir bien y si no lo estáis, quizá mejor esperar.

Os "resumo" mi caso (otra vez): Después de la primera operación del tumor en el izquierdo en el 2003 el doctor Roca-Riba me dijo que debía operarme lo antes posible del derecho. Nos veíamos cada 6 meses y él insistía, pero sobre todo, respetaba mi opinión de esperar. Tenía que reorganizar mi vida, llevaba una vida superestresante, de clientes, proveedores, impagados y empleados rebeldes. Mientras el tumor del derecho crecía, yo empecé a probar terapias naturales. De todas he sacado alguna conclusión buena y, aunque no sea fanático de ninguna de ellas, reconozco que han cambiado mi vida y me han cambiado a mí. Y así llegué a la visita de Septiembre de 2009 y le dije al Dr. Roca-Riba que ese era el momento, que estaba preparado y que sabía que iba a salir bien. El Dr.Roca-Riba apostó por mí. Y yo por él. Ni siquiera siendo como soy un GoogleAdicto me informé de los implantes. A la pregunta "que implante me pondrán", me respondió: "uno de ultima generación, el que ponemos habitualmente y que nos funciona bien". Suficiente.

Yo no era candidato porque el tumor era muy grande y apenas quedaba nervio para "enganchar". Pero enganchó, vaya si enganchó. Y salí con el facial intacto. Y con el equilibrio bastante bien. Y una calidad de vida futura de "mayusválido".

Ser optimista incondicional, ese es el gran secreto.
PS: Futuribles: Leed este post el día antes de la operación. Amén.