Estoy atascado en mi rehabilitación. A lo de ayer hay que unir que no he tenido un buen día. En el trabajo ha habido un pica pica de despedida de un compañero y me he ido porque no entendía ningún "jijijaja" y ya no sabía que cara poner (y mira que ayer tuve entreno). El agobio de los proyectos que no acaban de salirme bien no ayuda mucho tampoco y menos el estrés de las prisas. A los compañeros sigo sin entenderles y no porque sean 15 años más jóvenes (que también). Total que a medida que pasan los días (y van 74) el "ya oigo un poquito" se va transformando en "todavía oigo un poquito" y ya estoy pensando en cambiar las pilas de bote, porque éste se llena y seguimos casi igual.
En resumen, un mal día. Eso si, esta noche he encontrado aparcamiento. Y eso en Barcelona es un lujo. Si el que no se consuela es porque no quiere.
viernes, 27 de marzo de 2009
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Pues yo creo, y totalmente en serio te lo digo, que la gente cada vez habla peor. Vocalizamos fatal, no miramos a la cara al hablar, usamos vocabulario de mínimos, hablamos con la boca llena... En la mayoría de los casos intuímos lo que el otro acaba de decir, y con ese desdén tratamos al oído. Puedo imaginarme el pica-pica de ayer en tu trabajo y la gente tiene el bocata de chorizo en la boca mientras cuenta chistes a gritos, y eso no ayuda.
ResponderEliminarNo te desanimes, Pepe. Ahí va este fuerte abrazo y sigue luchando!!
Vinga va!!!!!! Quenerapú te raò la gent cada dia parlem pitjor!!
ResponderEliminarAnims i endavant, ja veuras que d'aqui a quatre dies serà molt millor.