Día 1031. Buenas noches y Buenafuente.

No ha sido poca la repercusión mediática en Catalunya de Charlio y su programa del lunes (Ferrán Monegal en El Periódico, por ejemplo).

Una razón es que poráki, el espacio barrió en audiencia al debate feistufeis de Zipi y Zape de las otras cadenas, con lo que se deduce que los catalinos estamos un poco hartos de "los barbitas canosas" y-barra-o preferimos otras opciones.

Otra es que el programa acaba de recibir un ondas al mejor programa autonómico. Parece que Sálvame no optaba a ello.

A riesgo de que confundas éste blog con uno de critica televisiva, vuelvo a hablar de la caja tonta y del estreno anoche, también en tevetré, del nuevo programa de Buenafuente: "¿Cóm va la vida?".

Era un programa enlatado, que se ha hecho en dos partes (desconozco si sólo son dos programas o hay más), entrevistando a Eduard Punset.

Buenafuente, por aquello del mono (no hablo de su físico, sino de su adicción), lo empezó con un monólogo, en el que mi Sennheiser hacía aguas.

Después de éste, el programa consistía en preguntarle a Punset un poco de todo.

El divulgador científico supo contestarlas dándole ese enfoque didáctico que tan bien maneja.

Hablando de la muerte, me quedé con esta brillante frase: "La gente se preocupa de si hay vida después de la muerte y no de si hay vida antes de la muerte"

A la pregunta de si las redes sociales nos unen o nos hacen sentir más solos, apostó por lo primero, no sin recalcar el exceso de la tecnología en la información, con un nuevo vocablo: Infoxicación, palabro que, de momento, da error en los correctores ortográficos. Y no es Pepeñés.

Comentó que para que la humanidad progrese, hace falta gente que se lance guiado por la intuición, que la razón nos frena a la hora de ejecutar nuevos proyectos. Hizo una práctica: que la gente del público se mirara la diferencia de alturas entre el anular y el índice, y dijo que el que tuviera más alto el anular, ganaría 10 veces más dinero. Lo razonó del siguiente modo: en el feto tenemos una descarga de testosterona que produce esa diferencia. A más descarga, más emprendedor el futuro bebé, por eso tendrá mejor sueldo. Decir que esa regla de tres (o menstruación de un trío) no cuadra con mi nómina. Y además, no sirve para las mujeres, y también son emprendedoras, claro (o CLOOONC).

También habló de la importancia de quedarse sin pensar en nada de vez en cuando. El "badar" de Charlio (aunque no utilizó ese término).

En resumen, una entrevista (primera parte) entretenida y adictiva que no me dejó ir a la cama a mi hora, y que pude seguir gracias a esa manera de hablar de Punset, a mi Sennheiser #2 (del despacho) y a unos subtítulos prácticamente perfectos.

Y digo yo para mis adentros y espero que alguien me conteste en mis afueras: cómo es posible que, en pleno siglo XXI, donde podemos ver un programa en diferido o directo por internet, no podamos descargarnos los subtítulos transcritos.

¿Para qué? Pues para poder "leer" el programa tranquilamente, extraer fragmentos o traducirlo con Google Translator del catalán al castellano. Y de paso, ponernos las cosas más fáciles a los cocleatas.

¿Nos manifestamos por ello?