Día 920. Hola, vida

Seguro que os ha pasado.

De repente te echas un novio (eso no me ha pasado) que le gusta el tunning.

Y tú, que no tenías ni ppppp idea de qué iba el rollo ese absurdo de hacer que un coche valga más por sus accesorios que por el coche del nota en sí (que es otra nota, valga la repugnancia), vas y te empiezas a meter en páginas web de Tunneros (no confundir con "atuneros", ni "tunos") y ya sabes hasta lo que es una estribera.

O resulta que tu hijo/a se apunta a un equipo de baloncesto (o basket) y vas y te empiezas a leer el mundo deportivo, buscando con ansia las páginas de ese deporte, y ya sabes que no es penalty aunque la toquen mucho rato con la mano. La pelota, kicir. Y hasta sabes que Yao Ming se retira !!!!

O te quedas embarazada (eso tampoco me ha pasado) y empiezas a documentarte de todo lo que cae en tu mano, y en el metro (en el cual descubres que te dejan asiento) coincides con otra embarazada e intercambias conocimientos premamá, náuseas y marcas de pañales.

O tu hijo se compra un perrito (esto ya me suena más), y buscas la mejor manera de educarlo. Y tú que criticabas tanto a los que mostraban sus cariñitos a las mascotas, que no entendías esos sentimientos hacia un "chucho", te sorprendes hablándole cara a cara como si te entendiera (y ¡ qué kñ, que te entiende !).

O resulta que cada vez oyes menos, y al buscar en el Google aterrizas en este blog, y lees, y quieres información de primera mano, y comentas, y te quedas atrapado poráki.

O puede pasar que estés esperando un trasplante de riñón, y estando de vacaciones con tu familia, encuentras entre las noticias de los periódicos accidentes de tráfico. Y, después de ponerte en el lugar de esas pobres familias que han perdido seres queridos, piensas que al menos, si son donantes, ayudarán a los que están en tu situación.

Y entonces te llaman a los tres días, y te fastidian el descanso con una llamada. Y sales pitando hacia Barcelona. Nunca te has alegrado tanto de que te jodan unas vacaciones.

¡Y es compatible !

¡ Y te operan esa misma tarde !

Y todas esas nubes grises que llevaban un año dando vueltas en tu cabeza, obligándote a depender durante 8 horas de una puta máquina todas las noches, arrastrando sueño, cansancio, angustias y bajones, todo eso se va a tomar por culo.

Y vuelves a ser como eras. Libre de ataduras. Saludable. Feliz.

Y ves el amanecer del primer día de tu nueva vida.

¡Te queremos!