Día 255. Only music

El día empezó sin madrugones.En Barcelona era fiesta [Fiesta, Rafaella Carra] , y hoy no tocaba estresarse.

Lo primero era ir a encargar unas flores a la calle Valencia [Valencia, Manolo Escobar], y luego recoger a nuestros amigos Vicenç y Hermi [Friends will be friends, Queen], rumbo a Castelldefels (Castefa).

La playa estaba desierta [Maria Isabel, los Payos]. Muy poca gente, asustada quizá por los frios de días pasados, pero llegó el sol [Here comes the sun, Beatles] para quedarse bastante rato con nosotros.

Tanto que nos hemos tenido que remojar varias veces. Yo, en silencio [The sound of silence, Simon & Garfunkel].

Luego, a comer en el merendero "La Pava"[Echale guindas al Pavo, Rosa Morena].
Mis "coleguitas" se empeñan en hablar todos a la vez y he tenido que hacer un gran sacrificio [Sacrifice, Elton John] para entender algo.

Por la tarde, casa de Hermi, que siempre saca algún video de antaño. Hoy me he visto en Menorca, hace 4 años, de normoyente. Vaya "remember" [Remember the time, Michael Jackson].

La música ha formado parte de mi vida durante casi 44 años. Todos los estilos y los ritmos se amontonan en mi archivo neuronal sin saber que hacer. Me he pasado muchos años maltocando instrumentos, la guitarra, la armónica, la flauta y ese gran compañero que tuve, el Casiotone, del que ya hablé en algún post.
Eso aumenta mi implicación con muchas canciones, incluso con algunas que no me gustaban mucho pero eran fáciles de tocar.

Hoy, en la playa, Vicençs me ha pasado el móvil con una canción en marcha. El año pasado le grabé una miniSD con muchas horas de música de muchos estilos.

No me ha costado mucho reconocerla: New York, New York de mi querido Fran Sinatra.

Es una canción que me emociona, con sus golpes de instrumentos de metal. La vibración que producía el volumen del altavoz hacía que no me perdiera en los cambios de ritmo.

Tuve la gran oportunidad de escuchar hace ahora 2 años un concierto de la Selva Big Band con la Orquestra de Cambra de l'Emporda y la voz de Xavier Piqué en el Palau de la Música Catalana. Todo un homenaje a Sinatra y una delicia para los oídos de los fans.

Una de mis canciones favoritas ha sido siempre "Fly me to the moon".
La había metido en el móvil con la intención de escucharla la noche antes de quedarme sordo.

Durante días le dí vueltas a qué canción debía ser la última.
Elegí esta. La Tere sabe porqué (y seguro que llora al leer esto).

Nunca lo conté, hasta hoy.

Y será la primera que escuche de nuevo en estéreo, dentro de algunos años.

(ver web del concierto)

PS: Gracias Enrique por inspirar a este pirado

PS2: Esta semana hemos tenido dos nuevas altas como comentakas. Dos Carmenes a las que doy la bienvenida, separadas por más de 1000 kilómetros que se unen en este blog al resto de opacos. Si seguís los comentarios veréis lo bien que se han acoplado al resto del grupo. Seguramente algunos de los que seguís como transparentes creéis que esto es un grupo cerrado y muy personal. Náda mas lejos de la realidad como podéis comprobar. Así que os invito a salir del armario bloguero y participar.
Advertencia: No es obligatorio llamarse Carmen