Día 324. Broadway Aragó

Prólogo
Este post está dedicado a aquellas personas que, a pesar de sus cabronadas, aman la vida y la viven con humor. Para entenderlo mejor es fundamental haber leído el post anterior.

Introducción
Elvira siempre tuvo una vocación frustrada. Quiso ser bailarina, pero tuvo que ayudar en casa a criar a sus hermanos, y todo se quedó en un sueño. A menudo ensayaba coreografías con ellos en cualquier parte, aún a riesgo de que la gente confundiera su vitalidad con la locura.
A sus 33 sigue llevando en su sangre el espíritu alegre que, a pesar de todas sus desgracias, sigue acompañándola.

El musical
Como cada día se disponía a cruzar el semáforo del Carrer Aragó, camino de su casa.
Mientras esperaba a que se pusiera en verde, en un coche sonaba a toda pastilla el “do-re-mi” de “Sonrisas y lágrimas”

Don, es trato de barón.

Res, selvático animal.

Los pies se le empezaron a mover, sin que pudiera evitarlo

Mi, denota posesión.

Far es “lejos” en inglés.

Los brazos le acompañaban. Detrás tres chicas se reían de sus locuras. Un joven con una especie de Sonetone en la oreja le miraba perplejo.

Sol, ardiente esfera es.

La, al nombre es anterior.

Ya no podía controlar los aspavientos

Sí, asentimiento es

Y otra vez ya viene el Doooooooooooo

Cantaba alegre, mientras el semáforo de peatones se ponía en verde, y comenzaba a cruzar, mientras la música seguía sonando cada vez más fuerte

Don, es trato de barón.

Res, selvático animal.

En medio de la calle se unió a sus pasos el joven “sordo”, un poco patoso, pero gracioso.

Mi, denota posesión.

Far es “lejos” en inglés.

Las tres chicas risueñas se miraron entre ellas y con un ademán de “porque no” se unieron al grupo

Sol, ardiente esfera es.

La, al nombre es anterior.

Los dependientes de la mantequería “El Ravell” con su elegante uniforme negro cantaban en voz grave mientras la nueva iluminación de la calle Aragó parpadeaba a lo largo

Sí, asentimiento es

Y otra vez ya viene el Doooooooooooo

Todos juntos en varias zancadas grandes se metieron en el Mercat de la Concepció, donde por los altavoces seguía la misma música

Don, es trato de barón.

Res, selvático animal.

Los puestos de fruta hacían malabares con manzanas entre ellos

Mi, denota posesión.

Far es “lejos” en inglés.

Dos pescateros movían la boca de los rapes para simular que cantaban.

Sol, ardiente esfera es.

La, al nombre es anterior.

Elvira y el sordo cruzaban el mercado en un pasillo que habían hecho las decenas de personas que ahora bailaban a la vez

Sí, asentimiento es

Y otra vez ya viene el Doooooooooooo

Y quedaron en un plano final, con los brazos en alto, mirando hacia arriba, con Elvira en el centro.

Siguieron así unos segundos, después de los cuales todos bajaron los brazos y siguieron con su rutina diaria, porque en los musicales siempre acaba así.


Y el “sordo” siguió su camino, mientras pensaba:
“cuando lo cuente esta noche en el blog, no se lo van a creer”




Estos hicieron algo parecido, pero no les quedó tan bien



Gracias Juanan, por inspirarme